domingo, 28 de diciembre de 2025

Cenote abismal

 


Las palabras resuenan, ahogadas, en un cenote abismal.

No hay salida. 

No hay, en él, cielo ni infierno.

Solo un eterno purgatorio.

Plegarias que se consumen entre las brasas.

Incandescentes.

Incomprendidas.

Bañadas en un mar de pastillas.

"Escúchame, háblame, entiéndeme, no me mediques únicamente", decía Tracie Hodge.

Ocultarse, separarse, aislarse. 

No contaminar. 

Escribe Henri Nouwen "....la trampa más peligrosa en nuestra vida no es el éxito, la popularidad o el poder, sino el autodesprecio.."

Un subproducto fallido de la creación.

Mentes enfermas. 

Miedos sin nombre.