Alguien se preguntaba hace años dónde quedaban los sentimientos inconclusos.
Y fue a orillas de aquel lago estancado y enfermizo cuando esa misma pregunta empezó a turbar mi mente.
Exactamente allí. Ojeando de forma clandestina y consentida al mismo tiempo los bocetos de un cuaderno y de una vida que, sin saber cómo, se habían convertido en un enigma.
Enigmas. Verdades y mentiras.
Como decía Cohen, mantén la llama, pues la verdad es diminuta comparada con las cosas que aún tienes que hacer.
Obra de; @lord.cah